Llorando mi duelo
una madrugada,
sentí tu mirada
y me vi en el cielo.
Te vi como un hada,
hermosa y callada
que, al ver el recelo
de un alma asustada,
de anhelo empapada,
me diste consuelo,
y así, enamorada,
esa madrugada
calmaste mi anhelo.
yosoyasi
No hay comentarios:
Publicar un comentario